Recuerdos colgados.

Y es curioso como los sentimientos vienen y van... Aparecen mientras cuelgas la ropa lo más rápido posible para no quedarte petrificada por el frío. Y de repente, una pausa. Una imagen. Una anécdota. Un recuerdo al fin y al cabo... ¿Y qué pasaría si tú fueras esa camiseta ahí tendida? Sí, estas colgada de tus recuerdos, pero ¿quién te ata a ellos?¿una simple pinza? Hace un par de días llegué a un momento crítico. Me sentí esa camiseta que cansada de luchar contra ese viento cargado de malos tragos y dolor se deshizo de su pinza... ¿y cuál fue mi sorpresa? Que me sentí libre... Más libre que nunca. Una acción que un tiempo atrás me hubiera dejado por los suelos ( es más ya había pasado ) no me afectó. Fue como si se tratará de la vida de otra persona, del posible dolor de otra...  Y me alivié. Parece que ya se ha cubierto el cupo del dolor, o al menos por un tiempo. Ni siquiera sentí remordimientos, sólo indiferencia. ¿Un deseo? Que por favor esta sensación no sea pasajera...

(foto: Sencé)

He, the one?

Era posiblemente el chico al que más defectos se le podrían sacar únicamente observando su comportamiento unos días. Ni siquiera era guapo. No aspiraba ni a un chico "gamba" pero tenía algo, y no sólo para ella.. sino para las típicas arpías que rondan a tu alrededor criticando cada movimiento. ¿Su cara? Nada destacable... incluso algo cómica si te descuidas pero, sin embargo, otra vez ese algo. Supongo que es cómo el típico chulo de película americana con su chupa de cuero y su Harley a la puerta, pero sin todo eso y en versión cutre. ¿Lo más fascinante? Ganar su confianza, ver como en realidad es UNA PERSONA! que se podía hablar con él de asuntos serios y al minuto experimentar vaciles y máximo tonteo... Hacía sentir bien, era como una fuerza de atracción... Pero se crearon conflictos y se perdió todo... Así de repente y casi que es mejor... Ahora es gracioso ver cómo la gente se humilla y roza niveles de involución total con el mero objetivo de llamar su atención. Un consejo: si no ha mostrado el mínimo interés por ti, es por algo así que no seas ridícula y apaga el cigarrillo...

Negación.

"La negación es un mecanismo de defensa que consiste en enfrentarse a los conflictos negando su existencia o su relación o relevancia con el sujeto.
Se rechazan aquellos aspectos de la realidad que se consideran desagradables. El individuo se enfrenta a conflictos emocionales y amenazas de origen interno o externo negándose a reconocer algunos aspectos dolorosos de la realidad externa o de las experiencias subjetivas que son manifiestos para los demás. El término negación psicótica se emplea cuando hay una total afectación de la capacidad para captar la realidad."

No siento
No sufro
No pienso en ti
No recuerdo momentos
No me importan tus comportamientos infantiles
No me muero por aparecer en tu puerta un día por sorpresa
No me importas
No me afectas
No echo de menos hablarte
No te echo de menos a ti
No te quiero...

¿Y se supone que mediante la negación nos sentimos mejor? Lo siento pero la psicología no me funciona...

Y llega un momento en el que tus lágrimas han estado tanto tiempo ocultas que cuando explotan queman, y no en un sentido figurado...queman al contacto con la piel.¿Y eso por qué? Quizás sea por la concentración de sentimientos que guardan cada una de ellas en su interior...el dolor, la tristeza, la ira... todos ellos condensados en unos milímetros cuadrados...Y aparecen en cuestión de segundos, como una bomba capaz de arrebatar la vida a miles de personas, se llevan la tuya...Se llevan la ilusión, ahogan los recuerdos, enfrían las ganas de vivir... Un momento en el que basta un leve recorrido por tu vida para descubrir hasta que punto es anti-idílica... Un momento en el que te planteas todo.

Take a break.

Vagar sin rumbo, sin un porque, por un algo imperceptible... Y cansada. Hasta que encontró su mirada... LA encontró... Y apartó la suya, por vergüenza, por miedo... Y recapacitó. Le miró fijamente, decidida y se levantó sin apartar la vista de sus ojos. Caminó decidida haciéndole un gesto para que la siguera... y fue tras ella, como hipnotizado. Ahí sobraron las palabras, hablaban los labios sin pronunciar palabra, las manos, las caricias, las respiraciones... Y volver cada uno a su vida como si nada hubiera pasado, daba igual que se murieran el uno por el otro, tenían que mantener su actitud fría, la faceta de no ser vulnerables a nadie...

Llevaba días sin dormir. Su demacrada cara no dejaba lugar a dudas. Era él quien le quitaba el sueño. Era él quien reinaba sus pesadillas... Ella era una chica fuerte, de carácter... o al menos aparentemente. Pero hasta el corazón más frío cae rendido ante el amor. Esa droga, enfermedad o simple sentimiento...Hacía tiempo que padecía este mal... temía el compromiso... ansiaba olvidar... Y lo consiguió, o al menos durante un par de meses. Después la historia se repitió. Su corazón cada vez pesaba más. Un corazón frío, como tallado en mármol. Y ella se encerraba en sí misma. Repasaba anécdotas, movimientos, miradas, palabras, intuiciones... y nada. No entendía nada. O quizás era que no quería entender. Encendían su memoria los recuerdos... tan ardientes, tan efímeros... Dos personas tan diferentes siendo una sola... Y gritaba en silencio. Y se culpaba.
Había pasado demasiado tiempo como para curar el dolor, pero últimamente su nombre era el protagonista de cada pensamiento... Eran tiempos nostálgicos, o simplemente necesitaba auto dañarse una vez mas... Era pleno invierno pero su cuerpo le quemaba. Abrió la ventana y cerró los ojos. Notó la fresca brisa de la mañana recorrer cada uno de sus poros, cada milímetro de su cuerpo... Los abrió ligeramente cegada por la luminosidad de la mañana. Y entonces los vio. Sobre uno de los tejados del patio. Gatos y palomas. Palomas y gatos. En armonía. Compartiendo trozos de pan que alguien había arrojado. Compartiendo alimento. Compartiendo amor... Y una vez más le recordó a él. Y envidió a los gatos por ser capaces de tener cerca a las palomas sin asustarlas por un error...

                   Coge aire y respira. Con los dedos temblorosos rula un cigarro como malamente puede. Es otoño pero el invierno empieza a mostrar sus señas. A su alrededor el ambiente es húmedo y frente a ella se extiende un largo paseo con alfombra marrón incluida, cortesía de los castaños. Esta quieta, sentada... pero su mente va de un lado a otro. Saca el móvil para hacer tiempo y enciende su ipod. Empieza a leer mensajes. Esos pequeños textos llenos de historias, de recuerdos de anécdotas. Y llega a fechas claves. Y justo empieza una canción. La canción. Sigue leyendo calada tras calada para intentar calmar su ansia, pero es inevitable... Esa sensación. Esas palabras. Esos momentos. Esas situaciones. Siente como un escalofrío recorre su cuerpo. En un principio parece tristeza, pero ya no le afecta. Ya no hay lágrimas. Sólo indiferencia... pero no verdadera indiferencia, sino de esa que a veces se ve poseída por el deseo de vendetta. Esa que muy a su pesar a sufrido tantas veces. Esa que en el momento en el que estalle nadie estará a salvo... Y apaga el móvil. Da una última calada a su virginia y se levanta dejando es esas escaleras sus fantasmas... 

Palabras, no hechos.../Hechos, no palabras...

"Y me pregunté si un recuerdo es algo que se tiene o algo que se ha perdido."






Las palabras se las lleva el viento... y los hechos, la vida. Hay una frase latina que dice "Facta, non verba" que viene a significar "hechos, no palabras" y me parece muy acorde a mi personalidad. Normalmente en la vida no me sirve con simples palabras sino que necesito hechos que prueben todo. Para algunas palabras un "por siempre" o un "te echo de menos" ponen todo su mundo del revés... pero ¿por qué? ¿por qué creer en un "para siempre" que pierde todo su valor a los dos días de ser pronunciado o en un " te echo de menos" pero no soy capaz de demostrarte que realmente es así? Me frustran esas cosas, incluso a veces hasta duelen... Ahí entran en escena los recuerdos... todas esas palabrejas que se dicen en un momento determinado que automáticamente están destinadas a formar parte del olvido. Lo siento pero yo cuando digo algo es porque lo siento, porque haría cualquier cosa porque fuera así... Si me gusta algo no lo dejo escapar como si fuera un céntimo que se te cae por la calle y dejas abandonado por la pereza de recogerlo. No.Cuando algo me interesa muevo cielo y tierra para conseguirlo...sacrifico lo imposible... Y¿sabes? Gracias por dejar tan claro que tus palabras, son simplemente eso...palabras. Palabras simples, tontas, y que supieron aparecer en el momento adecuado. Palabras que lamentablemente nunca aspirarán a ser hechos... Palabras sin sentido. Palabras que para mí difícilmente vuelvan a tener credibilidad. Palabras que tan solo son recuerdos. Palabras destinadas a ser olvidadas.

-"¡Joder chica! No hay quien te entienda..."

¿Me lo dices o me lo cuentas? El 99% de mi vida no me entiendo ni yo... Actúo de forma impulsiva aunque eso me lleve a días de tortura personal, de buscar el "por qué" de todas las cosas... Y sí, sería muchísimo más fácil limitarse a aceptar lo que se nos impone así porque sí. Soy ansiosa, quejica y fácilmente irritable. A pesar de eso  la gente me encuentra encanto. Es como el café, amargo, estimulante... que se trata de dulcificar a base de azúcar y aún así únicamente se aprecia lo más dulce en el último sorbo... cuando descubres su final... Algo así debe pasar conmigo... en el fondo, muy en el fondo, tengo un lado dulce.

Progreso, lo llaman...

Vivimos en una sociedad cateta y completamente ignorante empeñada en clasificarnos a todos con meras etiquetas, como si fuéramos ganado... Parece mentira que hoy en día las cualidades que más se midan son las que aparecen plasmadas en un papel junto con un número que determina nuestro futuro. Es indignante que se tache de tontas a las personas que simplemente no demuestran en un trozo de papel de lo que son capaces. Soy la primera en reconocer que hay gente de todo tipo, pero he conocido a muchas personas... y hay muchas que viven frustrados sin dejar ver todo el potencial que llevan dentro.Nos condicionamos un futuro, muchas veces infeliz, por el simple "qué dirán". Somos seres humanos, sociales... Sinceramente me llena muchísimo más tener una larga conversación con alguien, de esas que parecen parar el tiempo aunque en su expediente no aparezca un "sobresaliente" pero que si que tenga una "matrícula de honor" en sentido común.

Apariencias.

Jamaica 1981. Eso es lo que vestía mi profesora de literatura en la clase del viernes... Es realmente sorprendente  hasta donde llega la magia de Marley... Nunca sabes quién te podrá sorprender...